Cipolletti se trajo una valiosa victoria desde Lincoln,
después de dar vuelta un resultado adverso. Por la 14ª fecha de la zona Sur del
Argentino A, venció por 2 a 1 a Rivadavia con goles de Negri y Guajardo.
Con más actitud que buen juego, Cipolletti logró dar vuelta
un resultado adverso para ganarle por 2 a 1 a Rivadavia en Lincoln. El
Albinegro se trajo tres valiosos puntos como visitante, que lo ubicaron en el
lote de clasificación de la zona Sur del Torneo Argentino A, para meterle
presión a los equipos que mañana completarán la 14ª fecha.
El Capataz sufrió más de lo necesario, terminó pidiendo la
hora y Guillermo Ferreyra se convirtió en el salvador del equipo. Lo único que
rescató Cipo ayer por la tarde fue haberse traído la segunda victoria
consecutiva lejos de casa y demostrar, y demostrarse, que está en la lucha.
Desde el inicio Rivadavia fue un equipo vulnerable y parecía
que los dirigidos por Domingo Perilli no iban a tener mayores problemas en
Lincoln. En 14 minutos Cipo tuvo por lo menos tres jugadas de contraataque y la
posesión del balón, pero no fue preciso ni inteligente, y el local a pesar de
sus limitaciones, estaba al acecho.
A los 15 minutos, en la primera situación que tuvieron los
bonaerenses, Martín Blanco clavó un remate que se metió por uno de los ángulos
del arco de Ferreyra. Fue un baldazo de agua fría para Cipo, que lo dejó sin
reacción durante lo que restaba del primer tiempo.
Tras el gol, al Albinegro no le salió nada. Se equivocó en
la salida, Rivadavia seguió llegando, Juan Tolosa volvió loca a la defensa, los
pocos ataques que tuvo terminaron en imprecisiones e incluso Facundo Graciano
pudo haber marcado el 2-0 cuando terminaba la etapa.
En los vestuarios hubo un lavado de cabeza de Mingo a sus
dirigidos, porque fue cosa de seis minutos para que Cipo diera vuelta el
partido y se pusiera al frente.
A los 2 minutos, Germán Alecha tuvo la virtud de llegar a
una pelota que se iba afuera y sacar un centro al segundo palo que encontró la
cabeza de Oscar Negri y el ansiado empate.
De todas formas, el sufrimiento del Albinegro se prolongó
hasta el final. Apenas llegó a la igualdad, Ferreyra tuvo una de sus primeras
intervenciones importantes en el juego al frustrar un nuevo intento de Blanco,
en la jugada siguiente.
Tras el susto, a los dos minutos, el Capataz resolvió bien una
contra que Kevin Guajardo cambió por el gol que significó el triunfo de Cipo.
El neuquino continuó siendo el jugador más desequilibrante
en la ofensiva en lo que restó del partido, incluso a los 32 minutos en una
jugada polémica lo bajaron en el área cuando se perfilaba a aumentar la
diferencia, pero el árbitro no vio la infracción.
En los últimos minutos, Willy pasó a ser el hombre
importante en Cipo, ya que le tapó un remate a Matías Caro y otro a Brian
Visser.
El Capataz se trajo tres puntos valiosos y la tranquilidad
de haber cumplido con el objetivo, para meterse de lleno en el encuentro del
miércoles contra Deportivo Maipú por la Copa Argentina.